La herrería es el oficio de labrar el hierro. Generalmente el metal es calentado hasta que se vuelve incandescente, lo que solemos llamar al rojo vivo y posteriormente se somete al proceso de forjado. Las manufacturas típicas de la herrería son elementos de hierro forjado, rejas, muebles, esculturas, herramientas, artículos decorativos y religiosos, campanas, utensilios de cocina y armas.
Un herrero con suficiente experiencia y capacidad puede realizar con el mínimo de esfuerzo y energía, productos de aspecto refinado que combinan talento y originalidad. Otra de las principales funciones de la herrería consiste en clavar o poner herraduras en los cascos de los caballos. Para esta tarea los herreros trabajan especialmente con hierro negro, cuyo color se debe a la capa de óxido que se deposita sobre la superficie del metal durante el calentamiento.
La herrería es una de las pocas disciplinas en las cuales sus artesanos pueden jactarse de confeccionar ellos mismos sus propias herramientas.